Existen preguntas cuya formulación por parte del entrevistador se consideran ilegales, o cuestionables, entre ellas asociamos a las que están relacionadas con el estado civil, o emocional de una persona.
Una de estas preguntas está relacionada con el estado civil, la orientación sexual y situación familiar de los candidatos a ocupar un cargo.
Aunque incómodas e ilegales, muchos aspirantes las responden por considerar que son aspectos normales o necesarios y a menudo el entrevistador ignora la ley y su finalidad es conocer mejor al candidato.
Posibles opciones para responder preguntas de índole personal
Es muy probable que el entrevistador no realice las preguntas con la intención de ofender, pero si se dan en alguna parte de la entrevista, tal vez te sirva leer esto.
El llegar a realizar este tipo de preguntas puede concebirse como una forma para conocer un acerca del nivel de compromiso del trabajador y cómo podría afectar su situación familiar al entorno laboral.
Lo trascendental es siempre responder las preguntas.
La opción más extrema es hacer saber al entrevistador que la pregunta no viene al caso y que no estás obligado a responder. Tu respuesta no puede afectar el proceso de selección.
Por otra parte, puedes examinar bien la pregunta y responder en cómo podría tu situación sentimental afectar tus responsabilidades dentro del trabajo.
Una estrategia muy efectiva es formular al entrevistador la interrogante de ¿cómo la información que te solicita tiene relación con el cargo?, es decir, explícale que te gustaría saber si pueden existir limitantes relacionadas con ti estado civil.
Frente a toda la información expuesta, es importante considerar que existen algunos aspectos íntimos en la vida de los candidatos que son temas ilegales, que no deben ser abordados en un proceso de selección.
Consultar e interrogar a un candidato acerca de situaciones privadas, cómo si está casado, soltero o divorciado, puede ser considerado ilegal y puede concluir en la violación de la intimidad.
En casos más extremos, en algunas organizaciones llegan a consultar con relación a las preferencias sexuales de los candidatos.
Estos son aspectos relacionados con el entorno privado de las personas y aunque es ilegal resulta frecuente escuchar preguntas relacionadas directamente con estos aspectos en las entrevistas de trabajo.
¿Cómo abordar la entrevista?
Lo elemental es organizar con anticipación las posibles respuestas que puedes ofrecer a las preguntas más comunes en el momento de la entrevista.
No te sientas aludido con ninguna pregunta que consideres incómoda o fuera de lugar, te recomiendo mantener la equidad y responder de forma efectiva.
Cuando el entrevistador hace esta pregunta, tal vez solo busca información que le pueda indicar la disponibilidad que tiene el aspirante de cambiar de residencia, viajar con frecuencia, o laborar horas extras.
En la búsqueda de obtener esos datos, a menudo olvidan que algunos atributos tan íntimos que están protegidos por las leyes; por ser considerarlos como discriminatorios y permiten que los candidatos se nieguen a ofrecer información sobre aspectos relacionados con su intimidad.
En tal sentido la dirección de la entrevista de selección solo debe enfocarse en la información que la empresa requiera conocer para decidir si está ante el candidato idóneo.
Si un posible empleador entra al terreno de la intimidad es crucial que utilices tu criterio al responder, por lo que resulta fundamental acudir preparado a la entrevista de empleo.